La incontinencia urinaria ocurre cuando se pierde el control de la vejiga. En algunos casos, puede vaciar completamente el contenido de la vejiga. En otros casos, es posible que solo tenga fugas menores. La condición puede ser temporal o crónica, dependiendo de su causa.
La incontinencia urinaria afecta a las mujeres con más frecuencia que a los hombres en una proporción de 2 a 1. Sin embargo, esta condición puede afectar a cualquier persona y tiene muchas causas diferentes. A medida que envejece, los músculos que sostienen la vejiga tienden a debilitarse, lo que puede provocar incontinencia urinaria. Muchos problemas de salud diferentes también pueden causar esta condición.
Los síntomas pueden variar de leves a graves y pueden ser un signo de cáncer, cálculos renales, infección o agrandamiento de la próstata, entre otras causas. La incontinencia urinaria puede interferir con la vida cotidiana y provocar posibles accidentes.
Tipos de incontinencia urinaria
La incontinencia urinaria se divide en tres tipos generales. Puede experimentar varios tipos al mismo tiempo.
- Incontinencia de esfuerzo
- La incontinencia de esfuerzo se desencadena por ciertos tipos de actividad física.
Por ejemplo, podría perder el control de su vejiga cuando:
– ejercicio
– tos
– estornudar
– reír
Tales actividades ejercen presión sobre el músculo del esfínter que retiene la orina en la vejiga. El estrés adicional puede hacer que el músculo libere orina.
- Incontinencia de emergencia
La incontinencia de emergencia ocurre cuando pierde el control de la vejiga después de haber sentido una necesidad repentina y fuerte de orinar. Una vez que el impulso toca, es posible que no pueda llegar al baño a tiempo.
- Incontinencia por rebosamiento
La incontinencia por rebosamiento puede ocurrir si no vacía completamente la vejiga al orinar. Más tarde, parte de la orina restante puede filtrarse fuera de la vejiga. Este tipo de incontinencia a veces se llama «goteo».
- Incontinencia funcional
A diferencia de otros tipos de incontinencia, la incontinencia funcional es causada por barreras físicas o mentales que pueden impedir que alguien llegue al baño a tiempo. Esto puede deberse a problemas cognitivos como la demencia o la enfermedad de Alzheimer, problemas musculares como la artritis o problemas neurológicos como un accidente cerebrovascular o daño de la médula espinal.
Causas y factores de riesgo de la incontinencia urinaria
Hay muchas causas potenciales y factores de riesgo para la incontinencia urinaria.
Algunos factores de riesgo pueden incluir:
- músculos de la vejiga debilitados, que pueden resultar del envejecimiento
- daño físico a los músculos del piso pélvico, como desde el nacimiento
- agrandamiento de la próstata
- cáncer de próstata o vejiga, que puede ejercer presión sobre la vejiga
- una afección neurológica como demencia, Alzheimer o una afección física que puede impedirle llegar al baño a tiempo
- una infección como una infección del tracto urinario, infección de la vejiga, infección renal o cálculos renales
- embarazo
- sobrepeso
- diabetes
- menopausia
Algunas de las afecciones que causan incontinencia urinaria son fáciles de tratar y solo causan problemas urinarios temporales. Otros factores son más persistentes.
Las causas comunes de incontinencia urinaria pueden incluir:
- Envejecimiento
- Daño:
los músculos del piso pélvico sostienen la vejiga. El daño a estos músculos puede causar incontinencia. Puede ser causada por ciertos tipos de cirugía, como la histerectomía. También es un resultado común del embarazo y el parto.
- Agrandamiento de la próstata
- Cáncer
Otras causas potenciales de incontinencia pueden incluir:
- Estreñimiento • infecciones del tracto urinario (ITU)
- cálculos renales o vejiga • prostatitis o inflamación de la próstata •
intersticial o una afección crónica que causa inflamación en la vejiga
Algunos factores del estilo de vida también pueden causar episodios temporales de incontinencia. Por ejemplo, beber demasiado alcohol, bebidas con cafeína u otros líquidos puede hacer que pierda temporalmente el control de la vejiga.
Cuando busca ayuda médica
Cualquier caso de incontinencia es una razón para buscar ayuda médica. Puede ser un síntoma de una afección más grave que necesita tratamiento. Incluso si la causa subyacente no es grave, la incontinencia puede ser una perturbación importante en su vida. Es importante obtener un diagnóstico preciso y discutir las opciones de tratamiento. En algunos casos, la incontinencia puede ser un signo de una emergencia médica.
Complicaciones
La incontinencia urinaria y el tratamiento de la incontinencia urinaria pueden provocar complicaciones, dependiendo de la causa. Estas complicaciones pueden incluir:
- Infecciones del tracto urinario. Las infecciones del tracto urinario pueden ser causadas por la ropa interior mojada contra la piel. Esto puede crear un ambiente donde las bacterias pueden crecer.
- Daño renal. En algunos casos en los que se obstruye el flujo de orina, es posible que tenga problemas renales o insuficiencia renal.
- Celulitis. Esta infección de la piel es causada por bacterias y puede causar hinchazón y dolor.
- Efectos secundarios de los medicamentos. Los medicamentos utilizados para controlar la incontinencia urinaria pueden causar efectos secundarios, dependiendo de la medicación. Los efectos secundarios pueden incluir boca seca, náuseas, presión arterial alta u otros.
- Efectos secundarios del catéter. Si se le coloca un catéter, puede tener efectos secundarios como infecciones y traumatismos.
- Efectos secundarios sobre la salud mental. La incontinencia urinaria puede causar sentimientos de ansiedad, depresión o aislamiento social.
Diagnóstico
Durante la reunión, es probable que el médico te haga preguntas sobre tus síntomas. Probablemente querrán saber cuánto tiempo ha estado con incontinencia, qué tipos de incontinencia ha experimentado y otros detalles.
También pueden preguntarle sobre sus hábitos diarios, incluida su dieta típica y cualquier medicamento o suplemento que tome.
Dependiendo de los síntomas y el historial médico, también pueden requerir pruebas adicionales, que incluyen:
- Recolección de una muestra de orina para su análisis. El personal del laboratorio puede revisar la muestra de orina para detectar signos de infección u otros problemas.
- Medir la cantidad de orina que libera al orinar, la cantidad que queda en la vejiga y la presión en la vejiga. Esta información se recopila insertando un catéter o un pequeño tubo en la uretra y la vejiga.
- Realización de una cistoscopia. Durante esta prueba, insertarán una pequeña habitación en la vejiga para examinarla de cerca.